Bienvenida al primer trimestre de tu embarazo. Lo primero que debes de saber es que tu cuerpo va a empezar a experimentar muchos cambios físicos y hormonales, que tendrán un impacto en tu cuerpo y en tu estado de ánimo, tranquila, es algo normal. Es muy importante que asociemos el embarazo como un proceso natural de nuestro cuerpo y no a una enfermedad, esto nos permitirá disfrutar más de el.
Durante el primer trimestre puede que no parezca que estés embarazada, ya que para muchas mamis primerizas no empezarán a notar que les crece la barriguita hasta la semana 12. Sin embargo, si este es tu segundo embarazo, probablemente empieces a notarte barriguita mucho antes, ya que los músculos de tu útero y barriga se han estirado en tu embarazo anterior, por tanto, será más fácil hacerlo de nuevo debido a su elasticidad.
El primer trimestre empieza a contarse desde el primer día de tu última regla hasta el final de la semana 12. Para mí, el primer trimestre es muy interesante, ya que durante estos primeros tres meses pasan muchas cosas. La fecundación ocurre alrededor de la semana 2 o 3, es decir, cuando el espermatozoide fecunda el óvulo, y es aquí donde empieza la acción. Una vez el óvulo está fecundado empezará a viajar a través de la trompa de Falopio, durante este viaje empezará ya a crecer hasta que llegue al útero. Una vez en el útero se implantará y empezará a desarrollarse hasta que finalice el embarazo.
Algo muy curioso que ocurre en este trimestre, es que, el bebé crece mucho más rápido que en cualquier otro momento del embarazo. Hacia la semana 6 el latido fetal ya se podría escuchar a través de una ecografía, y hacia el final de la semana 12, los huesos, músculos y todos los órganos del bebé ya estarían formados. En este punto del embarazo tu bebé ya parece un humano pequeñito y lo pasaríamos a llamar feto. Además, alrededor de esta semana ya estarían empezando a practicar como tragar. Qué curioso, verdad?
La hormona encargada de muchos de los síntomas que experienciaréis durante el primer trimestre es debido a la hormona gonadotropina coriónica humana (hCG), esta hormona es una glicoproteína que se libera después de la implantación. Gracias a su presencia podremos confirmar tu embarazo a través de una muestra de orina o de sangre.
Síntomas del primer trimestre del embarazo
- Amenorrea (ausencia del periodo)
- Sabor metálico en la boca
- Dolor o sensibilidad en los pechos
- Náuseas y vómitos
- Cansancio y fatiga
- Cambios de humor
- Variaciones en el apetito, nuevos gustos en las comidas, cosas que no te gustaban antes ahora sí, y del revés, cosas que te gustaban ahora ya no te gustan
- Se agudiza el sentido del olfato
- Necesidad de orinar más frecuentemente
- Aumento en la cantidad de flujo
- Dolores de regla
- Pelo más brillante
- Pueden aparecer marcas en la cara
- Sensación de estar hinchada
- A veces durante la implantación se puede dar un leve sangrado, que puede durar de 1 a tres días, suele ser muy leve y tener un color más oscuro que el de la regla normal.
Primera Visita
La primera visita de control con la matrona se suele realizar entre la semana 8 y 10 de gestación. Esta es una de las visitas más importantes de tu embarazo ya que se crea tu libro de embarazo donde se recogerá toda la información de este. Los datos más importantes serán:
- Antecedentes médicos
- Antecedentes obstétricos
- Antecedentes familiares
- Toma de tensión arterial
- Peso y altura
- Analítica de sangre
- Muestra de orina
Después de la recogida de información, tu matrona te proporcionará educación prenatal y una serie de consejos acerca de la alimentación, ejercicio, suplementos, higiene bucal, higiene personal, actividad laboral, relaciones sexuales, hábitos tóxicos y mucho más. Es un momento muy importante para asegurarnos de que estéis bien emocionalmente, muchas veces el aumento de hormonas en vuestro organismo os puede hacer sentir como una montaña rusa, pero si sentís que necesitáis ayuda, es un buen momento para pedirla.
Por último, se te organizará la cita para tu primera ecografía.
Primera Ecografía
La primera ecografía es una de las más entrañables, y a la vez una de las más temidas por los papis. Esta ecografía (eco) se realiza entre la semana 11 y 13 del embarazo, y es muy útil ya que nos va a proporcionar mucha información. Será posible saber si nuestro embarazo es múltiple o individual. A través de las medidas del feto, se delimitará la edad gestacional y se concretará una fecha probable de parto. Esta eco nos permite saber la vitalidad del feto, es decir, si hay o no latido fetal. Esto puede causar mucho miedo, ya que, algunas veces no hay latido fetal. Muchas parejas prefieren esperan a compartir la noticia con sus familiares y amigos, hasta después de realizarse esta ecografía, para asegurarse de que todo va bien.
Además, nos permitirá ver algunas malformaciones físicas o alguna posible alteración cromosómica, mediante el screening combinado de cromosomopatías o triple screening. Este screening mide una serie de parámetros como: translucencia nucal, el hueso nasal o el flujo fetal. Este screening calcula el riesgo que tiene el bebé de padecer alguna alteración cromosómica, como el Síndrome de Down (Trisomía 21), Síndrome de Edwards (Trisomía 18), Síndrome Patau (Trisomía 13). Para realizar este screening se tienen en cuenta tres datos: edad de la madre, niveles de dos proteínas fabricadas por la placenta (beta-hCG libre y PAPP-A) que se obtienen a través de una muestra de sangre de la madre, y los datos recogidos de la ecografía.
Como os he dicho, este screening nos calcularía un riesgo bajo o alto, pero no sería una prueba diagnóstica. En el caso de obtener un riesgo alto, se nos ofrecerían realizar unas pruebas más precisas para descartar o confirmar el riesgo. Podemos dividirlas en pruebas invasivas y no invasivas.
Prueba invasiva
- Amniocentesis: consiste en la introducción de una aguja espinal muy finita a través de la pared abdominal materna para aspirar una muestra del líquido amniótico. El líquido amniótico contiene ADN fetal libre que contiene la información que buscamos. Esta prueba tiene riesgo bajo de aborto o rotura prematura de membranas.
- Biopsia corial: obtiene una muestra de las vellosidades coriales de la placenta, que luego se analizaría para hacer un estudio genético. Esta prueba se puede hacer transabdominal o transcervical , también tendría un riesgo bajo de aborto o rotura prematura de membranas.
Prueba no invasiva
Hoy en día, existe un test prenatal invasivo que a partir de una muestra de sangre de la madre nos permite detectar las anomalías cromosómicas más frecuentes. Estás serían: Síndrome de Down (Trisomía 21), Síndrome de Edwards (Trisomía 18), Síndrome Patau (Trisomía 13) y anomalías en los cromosomas sexuales. Además, nos puede decir el sexo del bebé. Este test tiene un índice de detección de hasta un 99% y no conlleva ningún riesgo para la madre ni para el feto. El test se suele realizar por privado y puede tener un coste elevado.
Es importante conocer todas las pruebas que se ofrecen para poder tomar una decisión informada.
Después de esta ecografía ya estarás a punto de entrar en el segundo trimestre. Espero que te haya servido de ayuda este post, y nos vemos en el siguiente.
Un abrazo,
Yanira Blanco.