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Coronavirus y embarazo

Hoy me gustaría hablaros acerca del coronavirus (COVID-19), y, además, de cómo afecta al embarazo y al recién nacido. Estas últimas semanas, tanto en las redes sociales como en los medios de comunicación, no se habla de otra cosa que no sea el coronavirus, por ello me gustaría transmitiros a vosotras, las embarazadas y a las mamis primerizas, un poco de calma y tranquilidad a través de este post.

¿Qué es el coronavirus?

El virus COVID-19, es un nuevo virus asociado a la misma familia de virus del Síndrome respiratorio agudo severo (SRAS) y a algunos tipos de resfriados comunes. La estimación del periodo medio de incubación es de 5 días según recientes estudios, y el periodo de cuarentena de 14 días desde el momento de exposición al virus. El mecanismo de transmisión es a través del contacto directo con secreciones respiratorias (tos, estornudos) o al tocar superficies contaminadas por estas. Los principales síntomas son fiebre, tos seca, dificultad respiratoria y fatiga. Podría aparecer también dolor de garganta, escalofríos, dolor de cabeza, malestar general y diarrea. El 80% de las personas que hayan contraído el virus se recuperaran sin necesidad de recibir un tratamiento especial. Los casos más graves están asociados en personas de edad avanzada o personas con enfermedades de base (cardíacas, respiratorias, diabetes, autoinmunes, cáncer…), en estos casos el virus podría causar neumonía, problemas graves respiratorios o incluso la muerte.

Coronavirus y embarazo

El brote de nuevo coronavirus puede resultar particularmente preocupante para las mujeres embarazadas, pero, por el momento, no existen pruebas científicas que respalden que las embarazadas tengan mayor riesgo de contagio que el resto de la población. Tampoco hay evidencia científica de que haya transmisión vertical, es decir, que la madre pueda transmitir el virus al bebé dentro del útero, en el momento del parto o a través de la leche materna. Según el Colegio Real de obstetricia y ginecología (RCOG), la mayoría de las mujeres embarazadas solo padecerán síntomas leves o moderados, como los de un resfriado o la gripe. Hasta el momento solo se conocen dos casos graves en embarazadas. El primero ocurrió en China, una embarazada de 30 semanas con COVID-19, que requirió de cuidados intensivos y una cesárea de emergencia, la madre y el bebé se recuperaron bien. El segundo ha ocurrido en Málaga, una embarazada de 27 semanas y 5 días que ingresó con una neumonía bilateral y requirió de cuidados intensivos, también necesitó una cesárea de emergencia. Se creen que son dos casos excepcionales, y aislados. Se continúa investigando y los datos podrían cambiar en el futuro.

Es importante recordar, que el embarazo conlleva cambios físicos que pueden aumentar la vulnerabilidad de las mujeres embarazadas ante infecciones virales respiratorias. Las mujeres embarazadas que presenten enfermedades respiratorias deben de recibir un tratamiento prioritario, ya que tienen un mayor riesgo de sufrir efectos adversos.

Las mujeres embarazadas han de adoptar las mismas medidas preventivas que el resto de adultos de cara a evitar el contagio:

  • Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón. Esta es la medida más efectiva, ya que, una vez el jabón entra en contacto con el virus lo inactiva.
  • Evita tocarte la cara con las manos.
  • Evitar el contacto directo con personas infectadas o con aquellas que sospechan estarlo.
  • Evita tocar superficies que toca todo el mundo (barandillas, mostradores).
  • Taparse la boca y la nariz con el codo al estornudar o toser.
  • Evita salir de casa si no es necesario.
  • Si presentas algún síntoma llama a los teléfonos habilitados por las autoridades sanitarias.
  • El uso de mascarillas solo se recomienda si se presentan síntomas, para evitar el contagio a otras personas, en el caso de estar cerca de personas infectadas o que pudieran estarlo o en personas inmunodeprimidas.

Lactancia Materna

En cuanto a la lactancia materna, lo organismos y asociaciones internacionales como Unicef, el CDC (Centers For Disease Control And Prevention) de Estados Unidos y nacionales como APILAM, y AELAMA (Asociación española de lactancia materna) recomiendan mantener el contacto madre-hijo, así como la lactancia materna, en casos de madres infectadas, extremando las precauciones para minimizar el riesgo de contagio.

Las últimas recomendaciones de AELAMA en la epidemia actual de COVID-19 son:

En el caso de una mujer con sospecha o infección confirmada por SARS-CoV-2, en condiciones clínicas que lo permitan y de acuerdo con su deseo, debe evitarse la separación de la madre y el recién nacido facilitando el inicio y mantenimiento de la lactancia materna directamente al pecho. Para reducir el riesgo de transmisión al niño, la madre deberá adoptar procedimientos preventivos como la higiene exhaustiva de las manos antes y después de estar con contacto con el recién nacido y el uso de mascarilla, de acuerdo con las recomendaciones de la OMS.

La decisión de separar o no a la madre-hijo debe tomarse para cada familia de forma individualizada y teniendo en cuenta el conocimiento científico actual, las intenciones y deseos de los padres, la situación clínica de ambos, el consentimiento informado de los padres, y otras circunstancias como la situación logística del hospital, la familia y posiblemente también la situación epidemiológica local relacionada con la propagación de la COVID-19.

En el caso de madres asintomáticas, la separación rutinaria y retirada de la lactancia materna de forma sistemática conlleva, dado el conocimiento científico actual, más riesgos potenciales que beneficios. En el caso de que se precise una separación temporal de la madre y el niño, será imprescindible ofrecer apoyo a la madre para mantener la producción de leche, mediante la extracción manual o mecánica, pudiendo alimentar al recién nacido con la leche materna extraída. En cuanto la situación clínica lo permita o se confirme la negatividad de los test virológicos, se facilitará de nuevo el alojamiento conjunto madre-hijo y se apoyará la continuidad de la lactancia.

Si el contagio de la madre lactante sucede tras el parto, se recomienda la mantener y fomentar la lactancia materna, favoreciendo así el paso de anticuerpos al niño. Mantener la lactancia es probable que disminuya el impacto clínico de la enfermedad en el lactante, como en otras infecciones respiratorias como la gripe, debiendo eso sí mantener las medidas higiénicas ya descritas: uso de mascarillas y exhaustivo lavado de manos.

Me gustaría recordaros la importancia de leer noticias siempre de fuentes contrastadas y de organismos oficiales. La situación con el coronavirus cambia diariamente, los casos por coronavirus siguen aumentando y esto puede hacer que entremos en estado de pánico. España ha empezado a implantar medidas de contención para evitar que el virus se propague, por ello es importante que sigamos las recomendaciones que se nos dan. Recordad evitar ir a hospitales o centros de salud, solo acudid en caso de necesidad o urgencia. Desde @tumatronaencasa me gustaría transmitiros calma y tranquilidad en estas próximas semanas. Os mantendré informad@s de cualquier novedad.

Un fuerte abrazo.

Yanira Blanco.



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